La bestia de nuestro jardín




Por: Fernanda Velázquez | Alumna del taller de periodismo cultural FARO Indios Verdes

La Historia de nuestro país. Tierra, sueños, sueños traídos de otros mundos manifestados a través de un sueño americano. Anhelos profundos, universos llenos de historias individuales de una nación aparentemente lejana a la nuestra. Historias de personas que pasan caminando, colgados, amarrados buscando alternativas mejores, peores… no lo saben. Nadie lo sabe. Una bestia en mi jardín, una obra escrita y dirigida por Valentina Sierra, ocupa el aclamado teatro Isabela Corona desde este 5 de Octubre contándonos la historia de Damián, un niño que vive con su madre, una mujer ocupada en las labores de una mamá y además en pensar en los demás frente a las vías de un tren. Damián, como cualquier niño interesado por las historias de viajeros, escucha a los exploradores que transitan días y noches frente a su casa, recordando día a día que ellos también son personas. La alegoría de una bestia que camina sobre su rumbo sin la posibilidad de salir de su lugar, sin poder decidir su destino a pesar de viajar a otros a mundos lejanos, complementa el discurso escénico de una forma más empática con aquello que se asume, desde una perspectiva adulta, como bestia pero que a través los ojos pequeños significa más que eso. Frente a los ojos del espectador suceden una serie de mini espectáculos escénicos que no sólo se enfocan en argumentarnos una historia que hasta ahora es difícil de digerir; es mas que sólo ver a actores multidisciplinarios que llegan a las entrañas de nuestro corazón con sus diversas habilidades corporales e inclusivas. Este proyecto es más que mentes unidas en busca de un discurso que pretende poner frente a nuestros ojos la bestia de nuestro jardín. Este proyecto es la culminación de un arduo trabajo que une fuerzas multidisciplinarias para llegar a lo más profundo de nuestro sentir.